Esta fue una de las frases que el Presidente de la Confederación Minera de Chile, Hugo Paez, señaló, haciendo mención a los problemas climáticos que han afectado al norte de Chile por estos días.
En una reunión sostenida con el Seremi Metropolitano de Minería, Patricio Valdés Fuentealba, entre los diversos temas que se abordaron, se expuso la falta de protocolos de acción minera en relación con fenómenos climáticos tan devastadores como los que han afectado al norte de país. Frente a situaciones como esta, se observa el lado humano, las necesidades de los pobladores, se proyectan los planes de reconstrucción, entre muchas otras variables, que no incluyen indicaciones para las empresas mineras.
¿Qué ocurre entonces? Sucede que cada empresa minera es autónoma para tomar las decisiones que considere pertinentes. Puede enviar a los trabajadores a sus refugios y suspender las faenas, puede mantener a los trabajadores en la faena, extendiendo sus horarios y así la empresa tiene total libertad para actuar. A modo de ejemplo, el abogado asesor del Sindicato Cerro Colorado, señor Raúl Osorio, señaló que “en una de esas faenas, el jefe del turno decidió llamar a los buses de acercamiento para que bajaran a los trabajadores, sin considerar el hielo y las malas condiciones del camino, que los tuvieron expuestos al frío durante varias: afortunadamente no hubo nada que lamentar”, comentario que fue ratificado por el Presidente del Sindicato Cerro Colorado, Marcelo Franco.
Frente a esta realidad, el Seremi Valdés solicitó el despacho de información relevante para comenzar a trabajar en estos temas, sin embargo fue enfático al señalar que las cuestiones medio ambientales son parte de la autonomía de otra cartera.